Cuando el objetivo es invertir a largo plazo, la alternativa más beneficiosa es optar por los proyectos en pozo:
Rentabilidad:
Al finalizar la obra, se tendrá en las manos un departamento nuevo a estrenar si se opta por una zona en crecimiento, donde el valor normalmente tiende a incrementarse y además por el desarrollo del lugar.
Beneficio a largo plazo, pudiendo convertirse en un ingreso fijo al colocarlo en alquiler.
Factores a considerar:
Sobre el desarrollista, conocer algún proyecto o los edificios que se realizaron en años anteriores, principalmente para tener seguridad de donde se va a poner el dinero y cuál es el respaldo que tiene, además detener referencias sobre el estilo y el diseño.
- Pedir todos los datos de la constructora e indagar si cumplió con el plazo prometido, la calidad constructiva y que tenga un servicio de postventa.
- Tener en cuenta la zona del proyecto, optando por ubicaciones con potencial de crecimiento, sin dudas, aumentará el valor de la inversión a futuro.